¿Qué pasó con el Cuartito de El Gradiente?

Nos estamos comunicando en ésta oportunidad para transmitirles que el martes 24/07 la facultad decidió desplazarnos del "Cuartito".

Aquel cuartito lleno de alegría y creatividad, donde plasmábamos entre todos las ideas e ideales que pretendieran transformar nuestras carreras en bienes al servicio de la sociedad, en pos de un ejercicio enriquecedor de nuestras visiones de la realidad de nuestro país, en virtud del humanismo, la justicia y la igualdad, en virtud del pensamiento democrático, de la participación colectiva y universal, de la acción comprometida, de la responsabilidad de seguir sumando voluntades para repensarnos, rehacernos y crecer. Ese cuartito donde estábamos todos los días pensando y realizando las actividades que compartías con nosotros. Donde planeábamos los cursos y las charlas, donde funcionaba la secretaría de APS (Atención Primaria para la Salud) y DDHH del CECiM (que le corresponden a la agrupación "El Gradiente" desde hace 8 años). El lugar donde guardábamos los materiales para realizar los trabajos que hacemos en la Villa 31, donde llevábamos a cabo actividades de APS (vacunación, control de estado nutricional, formación de promotores de salud, talleres de salud sexual y procreación responsable) y educación no formal. Aquel cuartito donde todos los estudiantes se acercaban para discutir las maneras de cambiar la facultad y la realidad.

Lamentablemente tenemos que decir que no estamos sorprendidos. Desde el año pasado se viene demostrando una manera de comprender la salud y la universidad totalmente distinta de la que venimos luchando hace 9 años. Las situaciones son muchas y se vienen enumerando desde hace meses. Pero hoy el hecho es más puntual y los objetivos en lo redundante claros y transparentes: restarle derechos a los estudiantes, imposibilitar el pensamiento, la discusión y participación estudiantil en el ejercicio de la democracia en la facultad, y atentar contra los intentos de hacer de las ciencias de la salud bienes universales para todos los individuos de la sociedad y no para unos pocos que poseen los medios para sustentarlo. Para ello eliminaron el Puesto Sanitario para convertirlo en una oficina, prohibiendo "toda actividad vacunatoria, asistencial o de promoción y prevención de la salud" en el ámbito de la facultad, y atacando sin aviso ni reparo a nuestra agrupación donde más le duele, poniéndole trabas a la pasión en su pensar, decir y hacer de todos los días: mejorar y universalizar la provisión de salud.

Cada día se hacen más evidentes las formas de manejo de una gestión macrista, de corte privatista-corporativo, excluyente y acallante de toda forma de participación democrática. Los casos de recorte en lo social, en la asistencia al estudiante, las maniobras de persecución política constante... sobran los ejemplos.

Hoy nos toca ser víctimas, pero con la seguridad cada vez más firme y con el orgullo cada vez más profundo de estar en la vereda de enfrente. Cada día el horizonte es más claro y la acción más necesaria; pero siempre convencidos del proyecto que llevamos a cabo día a día con esfuerzo y alegría y de que no importa que tan malas se pongan las cosas, nunca vamos a bajar los brazos. Hoy, más que nunca, nos toca el deber individual y colectivo, moral y profesional, de redoblar nuestros esfuerzos y concentrar nuestros acciones en fomentar la unidad.